El CEI International Affairs de Barcelona organizó, en colaboración con el Instituto Español de Estudios Estratégicos, una Jornada sobre Seguridad …
El CEI International Affairs de Barcelona organizó, en colaboración con el Instituto Español de Estudios Estratégicos, una Jornada sobre Seguridad y Defensa el pasado 9 de noviembre bajo el título “Liderazgos personalistas y orden internacional, ¿qué está ocurriendo?”.
De la mano de cuatro grandes especialistas en la materia, se reflexionó en torno a una realidad que, en definitiva, nos muestra como individualidades personales dotadas de grandes esferas de poder son capaces influir de modo determinante en el devenir de las relaciones internacionales.
El primer coloquio, presentado y moderado por del tutor del CEI y Embajador de España, el Excmo. Sr. Fernando Perpiñá-Robert, contó con la participación del Excmo. Sr. Jorge Dezcallar, Embajador de España, y del Coronel José Pardo de Santayana, analista del IEEE, quienes dedicaron sus presentaciones a analizar el Impacto y coste de los liderazgos en conflicto: EEUU – Rusia – Europa – China. En particular, el Sr. Dezcallar puso de manifiesto tres grandes acontecimientos que se están produciendo en la actualidad y que marcan una tendencia común: el fin del occidentalismo.
De izquierda a derecha: el Coronel José Pardo de Santayana, el Excmo. Sr. Fernando Perpiñá-Robert y el Excmo. Sr. Jorge Dezcallar
El primer rasgo es la introspección de Estados Unidos, iniciada con Obama y acelerada con la administración de Donald Trump. El segundo es una crisis europea tanto económica como política; y, por último, la aparición de nuevos actores protagonistas. Occidente ha dejado de tener todo el poder, y potencias como China o India han empezado a reivindicar una representación acorde a su poder en el plano internacional. Frente al escenario de un mundo multipolar, el Embajador Jorge Dezcallar destacó que resulta imperiosa la necesidad de que Europa se haga fuerte y genere una auténtica política exterior y de defensa común.
Por su parte, el Coronel José Pardo de Santayana realizó un interesante análisis de dos de los liderazgos personalistas más influyentes en la actualidad: Vladimir Putin en Rusia y Xi Jinping en China. Destacó un común denominador entre ambos, caracterizado por el miedo y por un fuerte sentido nacionalista, en contra de los valores que consideran que occidente les quiere imponer.
El Coronel se refirió a la guerra pasiva que mantienen Rusia y Occidente. Una guerra que, principalmente debido a la debilidad económica de Rusia, se reduce a un leve incordio a la hora de negociar. China, por su lado, quiere volver a ser el Imperio del Sol que fue en el pasado tras haber recorrido tres fases: la humillación por parte de Occidente durante la guerra del opio y que después Mao volvió a unir; una época de desarrollo impulsada por un partido comunista liderada por Xiaoping; y «la nueva era», la de la dignidad, que centra su poder en un solo líder y huye de los ideales occidentales.
La segunda mesa redonda, presentada y moderada por el profesor y coordinador de la Jornada, el Dr. Pere Vilanova, se dedicó a analizar el Impacto y coste de la presidencia de Donald Trump en el Derecho Internacional con especial referencia al Derecho Internacional Humanitario. Como primera ponente, la Dra. Claudia Jiménez, profesora de Derecho Internacional Público de la Universitat Autònoma de Barcelona, destacó varios aspectos de la política del presidente: su prioridad basada en marcar su soberanía, centrarse en lo doméstico y cambiar la balanza comercial sacrificando los derechos humanos, el multilateralismo y el rigor.
De izquierda a derecha: la Dra. Claudia Jiménez, el Dr. Pere Vilanova y la Sra. Carme Colomina
Por su parte, la Sra. Carme Colomina, investigadora asociada del CIDOB, reflexionó en torno a los principales aspectos inter-relacionales de los liderazgos de Putin y Trump. En este sentido, destacó que ambos son paradigmas de liderazgos construidos a partir de la estigmatización del otro, que se sustentan sobre el llamado a la amenaza del enemigo.
Sobre este discurso, se hace descansar el fundamento legitimador de prácticas totalmente contrarias a los Derechos Humanos; especialmente en el caso de Trump, a quien no se le plantean mayores problemas en afirmar la legitimidad de la tortura como arma de defensa, o normalizar la existencia de Guantánamo.
Redacción por: Beatriz Castejón, alumna del Máster en Diplomacia y Función Pública Internacional y Dra. Sònia Güell, directora de la Jornada.