El pasado martes 6 de marzo el Embajador de España en Arabia Saudí, el Excmo. Sr. D. Álvaro Iranzo Gutiérrez, fue invitado a presentar información sobre la situación política.
El pasado martes 6 de marzo el Embajador de España en Arabia Saudí, el Excmo. Sr. D. Álvaro Iranzo Gutiérrez, fue invitado a presentar información sobre la situación política, económica y social, así como sobre las relaciones diplomáticas entre España y Arabia Saudí en el marco del Programa Aula Internacional del CEI. Acudieron al encuentro importantes personalidades representantes del mundo empresarial, económico e institucional, así como otros miembros de la diplomacia española.
El embajador empezó describiendo a Arabia Saudí como uno de los países más importantes de Oriente Medio, destacando su economía (con un PIB de 700.000 millones de dólares) y su influencia política en la región, al ser la cuna del Islam. Arabia Saudí tiene una economía que se ha basado, históricamente y de manera fundamental, en el petróleo, del cual es el primer exportador mundial, permitiéndole ser considerada una de las veinte economías más importantes del mundo. Particularmente, Arabia Saudí ha presentado en sus 3 últimos ejercicios un déficit público que se calcula que podría llegar al 16%, pero ha podido financiar el déficit endeudándose con mercados exteriores por primera vez gracias a sus amplias reservas de divisas, manteniendo su calidad crediticia con una nota A.
El primer aspecto que destacó el embajador fueron las recientes decisiones políticas que han marcado una evolución en la situación y expectativas del país. Por primera vez desde 1932, el Rey Salman bin Abdulaziz Al Saud ha acordado su sucesión produciéndose un salto generacional, siendo el Príncipe Mohamed Bin Salman de 32 años el elegido para sucederle, suponiendo, por su corta edad, un cambio radical en la tradicional línea de sucesión. Existe una gran esperanza en que dicho cambio generacional, a través de la Visión 2030 del Príncipe heredero, permita implementar el cambio estructural que necesita Arabia Saudí a los efectos de tener una base productiva más diversificada y una economía que no dependa exclusivamente del petróleo.
Así mismo, el Embajador remarcó que las relaciones entre España y Arabia Saudí, caracterizadas por un mutuo aprecio, carecen de relación contemporánea marcada, pero surgen del vínculo histórico compartido entre España y el mundo árabe. La evocación de España para los saudíes implica prestigio cultural e histórico. Estas relaciones, además, se ven reforzadas por la fuerte conexión entre las casas reales de ambos países, el reconocimiento de los saudíes del atractivo turístico de España y, de forma anecdótica, por el seguimiento al fútbol español que los ciudadanos saudíes aprecian tanto.
Estas relaciones cordiales sirvieron de base sólida para que la presencia empresarial española en Arabia Saudí se desarrollara entorno a diversos sectores como las infraestructuras, el transporte, el tratamiento de aguas y una multitud de servicios para Saudi Aramco, la que sin duda es la principal compañía estatal. Se calcula que los intercambios económicos entre ambos países se sitúan entre 5 y 7 mil millones de Euros anuales, importando el 15% del crudo necesario en España y exportando principalmente bienes de equipo. El embajador destacó la presencia española en Arabia Saudí enumerando proyectos estratégicos como el AVE de La Meca a Medina o el metro de Riad entre otros.
Tras el instrumento de planificación del Príncipe Mohamed Bin Salman denominado Visión 2030, existe el deseo de desarrollo y modernización económica. Si bien el sector de las infraestructuras ha sufrido un parón, determinados elementos clave como las carreteras de peaje o la privatización de la gestión aeroportuaria se mantienen fundamentales para el desarrollo de su economía. Otros sectores de marcada relevancia para las empresas españolas han ganado protagonismo. Representan una gran oportunidad para éstas, sectores como las energías renovables, el agua en todas sus facetas (tratamiento, distribución, desalación), los servicios de educación y formación profesional, el entretenimiento con la creación de grandes parques temáticos y el desarrollo deportivo y el turismo, tradicionalmente muy cerrado pero con un gran potencial, especialmente en la costa del Mar Rojo.
Por otro lado, el sector privado está llamado a aumentar su presencia en la economía saudita. Se ofrecerán menos licitaciones de proyectos llave en mano que serán sustituidos por distintos tipos de asociación público-privada. La privatización de un 5% de Saudi Aramco permitirá crear un fondo soberano, que será un vehículo de inversión a tener especialmente en cuenta para atraer inversiones en inmobiliario pero también en el sector industrial español. El Sr. Iranzo Gutiérrez también apuntó la importancia del sector defensa para Arabia Saudí, que es el tercer importador mundial. España ha sabido explotar esta faceta hasta ahora y deberá seguir haciéndolo ante la necesidad saudí en esta materia, resaltando los acuerdos que se encuentran en fase de negociación entre Arabia Saudí y Navantia o Airbus para la importación de 5 corbetas y de transporte aéreo.
El embajador hizo hincapié en la fase de transición que vive el país. Los inversores y empresarios reclaman seguridad jurídica y determinadas garantías que condicionarán su presencia en el país, pero se mostró confiado en que estos elementos existirán en un futuro cercano, destacando cambios legislativos, poniendo como ejemplo la nueva ley de quiebras o la transparencia en la adjudicación de concursos, filtrados por asesores extranjeros. El mercado laboral también está inmerso en una transformación para dar cabida a la creciente demanda nacional de empleo, liderado por nuevas generaciones bien preparadas, especialmente el sector femenino, que reclama su sitio en el mundo laboral.
Concluyó el acto poniéndose, tanto él como su oficina, a disposición de los presentes para cualquier información adicional o ayuda necesaria que pudiera requerirse en el desarrollo de proyectos o inversiones bilaterales tanto en Arabia Saudí como en España y animó a explorar las oportunidades que nacerán de este cambio aprovechando las buenas relaciones entre Arabia Saudí y España.
Relatoría elaborada por Jordi Sixto
Alumno de la Preparación de la Oposición a la Carrera Diplomática